Como cualquier persona propietaria de un gato sabe, los felinos son un tipo diferente de criatura. Las diferencias están en todo su cuerpo, lo que hace que muchos analgésicos utilizados en perros y personas sean tóxicos para los gatos. Esto significa que hayan menos opciones farmacéuticas disponibles para tu compañero felino.
Medicamentos
Los veterinarios pueden recetar tipos diferentes de medicamentos para tratar el dolor en tu gato. Los medicamentos para el dolor más comunes dados a los gatos son el Ketofen y el Metacam. Los opiáceos, como la morfina, también se prescriben para los gatos, pero por lo general sólo cuando sea estrictamente controlado y dado en la clínica veterinaria. Esto es debido a los efectos secundarios potenciales de estos fármacos. Los veterinarios también suelen recetar esteroides para ayudar a controlar el dolor y la inflamación. Desgraciadamente, los medicamentos no suelen ser tan eficaces en el alivio del dolor en nuestros amigos felinos, ya que alivian el sufrimiento de los perros y personas. Esto significa que las opciones no farmacológicas se utilizan más a menudo que los medicamentos cuando tu gato tiene dolor.
Tratamiento alternativo
La acupuntura se está explorando más como una alternativa o complemento a los productos farmacéuticos en el tratamiento del dolor de gatos. En el caso de lesión, el veterinario puede utilizar vendajes o férulas para proteger a un miembro dañado y reducir el dolor durante la curación. La terapia física y masajes también pueden ser usados para ayudar a tu gato a sanar y para aliviar el dolor. Tan simple como puede parecer, es probable que sea eficaz en el tratamiento del dolor para tu gato acalorado.
Cuidados de enfermería
El cuidado de enfermería es importante para controlar el dolor de tu gatito, si él se está recuperando de una lesión o cirugía, o si experimenta dolor crónico o artritis. Esto es tan simple como asegurarse de que tu amigo felino está limpio, especialmente si no es capaz de acicalarse a sí mismo. La clínica veterinaria puede proporcionarle camas acolchadas con mantas calientes cuando está hospitalizado y recetar arreglos similares para cuando llega a casa. El buen cuidado de enfermería disminuye señales – como el jadeo, silbidos y gruñidos – que indican que tu gato tiene el dolor. Darle calor e incluso acariciar y acariciar, probablemente hará que tu gatito reduzca la tensión en sus músculos, otra señal de que el dolor se alivia.
Medicamentos de venta libre
Aunque muchos guardianes de gatos pueden pensar que están ayudando a sus compañeros felinos dándoles un medicamento para el dolor de venta libre, como la aspirina u otro cuando están sufriendo, en realidad están envenenando a sus mascotas. Aquellos medicamentos de venta libre para el dolor, incluso aquellos que a veces se puede dar con seguridad a los perros, son extremadamente peligrosos para los gatos por la forma en que el hígado procesa los medicamentos. Son tan peligrosos que tan sólo dos píldoras regulares de Tylenol es sean fatales para tu gato. Nunca le des a tu gato ningún medicamento de venta libre. Si piensas que tu gato tiene dolor, consulta con su veterinario acerca de la mejor mezcla de productos farmacéuticos, tratamientos alternativos y de enfermería para ayudar a tu mascota.
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