Los gatitos son, sin duda, el más entrañable y atractivo de los animales cuando bebé. Pero si usted tiene un gatito con gases debido a problemas de estómago, es posible que no esté actuando como debería. El gas con mal olor no es sólo desagradable, también es doloroso para el gatito.
Ocho semanas de edad. Si intenta alimentar a su gatito con comida sólida, este sufrirá de gas maloliente por los intentos del tracto intestinal para hacer frente a los alimentos que aún no está preparado para digerir. Los gatitos no deben ser separados de sus madres antes de la edad de 8 semanas. Esto se debe a que un gatito recién nacido necesita un tratamiento completo de inmunización y nutrición rica en calorías proporcionada por la leche de la madre, la que ayuda al gatito a crecer. Si usted tiene un gatito neonatal (antes de la edad de 8 semanas) que se ha quedado huérfano y que está tratando de criarlo, usted debe utilizar una fórmula de reemplazo de la leche para gatos y posiblemente un yogur o Pedialyte, pero nada más durante esta etapa crítica mientras que su tracto digestivo todavía está madurando.
Mal olor en los gases. Usted puede notar que su gatito tiene gases, pero también pulveriza el material fecal y / o la emite sangre por el recto. Si este es el caso de su gatito, debe detener toda la comida y llevarlo al veterinario de inmediato para una valoración medica. Su gatito puede tener alergias a los alimentos o una enfermedad que causa mala absorción. Estas condiciones son fácilmente tratables, ofreciendo una fuente de proteína diferente o cantidades de comidas más pequeñas y frecuentes. Algunas medicinas que tratan el gas en los seres humanos también pueden ser utilizadas en los gatos, así que pregunte a su veterinario por el nombre y la dosis de un medicamento de venta libre.
Los cambios en la elección de alimentos. Una cosa que usted puede hacer para detener el gas de inmediato es suspender los alimentos que usted está dando a su gatito. Déle pequeñas cantidades varias veces al día en lugar de comidas completas una o dos veces al día. Cambiar la dieta para un alimento bajo en fibra, porque es más fácil de digerir. No ofrezca «alimento de personas.» Al cambiar la alimentación de tu gatito, hágalo gradualmente a fin de no alterar más su estómago. Mezcle la comida vieja con la nueva en un 25 por ciento a la proporción del 75 por ciento, añadiendo poco a poco más de los nuevos alimentos y menos del alimento anterior durante un período de una semana a diez días. Si un alimento bajo en fibra preparado comercialmente no ayuda, consulte a su veterinario para una recomendación y prescripción de la nueva dieta.
Competencia. La competencia entre los gatos de la casa puede causar que tu gatito tenga gases porque está tragando su comida demasiado rápido. El exceso de aire que está tomando mientras se alimenta va a su estómago y tiene que salir de alguna manera. Si su gato se alimenta junto a otros gatos o gatitos, trate de darle de comer solo, para que no sienta la necesidad de tragársela en cantidades por miedo a quedarse sin su parte.
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