Radiación y quimioterapia para gatos

enfermoDe acuerdo con la fundación de cáncer en los animales, casi seis millones de gatos son diagnosticados con cáncer cada año. Para algunos, se trata de una sentencia de muerte, sin embargo, un número creciente de gatos están recibiendo tratamiento a través de la radiación y la quimioterapia, con cierto éxito. Para los gatos, la buena noticia es que rara vez pierden su pelaje.

Control vs curación. A diferencia de la quimioterapia y la radiación para los seres humanos, estos tratamientos se usan en los gatos para controlar la enfermedad, y prolongar la vida del felino. Esto se debe a que el cáncer en los gatos generalmente se diagnostica sólo después de que ha avanzado de manera significativa. En algunos casos, cuando se justifica la radiación, los veterinarios son capaces de optar por un plan de tratamiento que incluye la posibilidad de una cura.

Radiación. La terapia de radiación es útil en la gestión de tumores superficiales, así como aquellos situados más profundamente, y que no pueden ser retirados a través de la cirugía. La radioterapia se administra a los gatos a través de una máquina (como una máquina de rayos X). La radiación en un gato es un poco más complicada de la de un ser humano, ya que los gatos no entienden la necesidad de permanecer quietos y deben recibir anestesia. Aunque las células sanas pueden ser asesinadas junto con las células enfermas, el consenso general es que los beneficios de la radiación son mayores que los riesgos.

Quimioterapia. Los gatos llevan mejor la quimioterapia que los seres humanos. Al igual que con la radiación, los medicamentos de quimioterapia, por desgracia no discriminan entre las células sanas y enfermas, y pueden matar a las células que deben vivir. Los posibles efectos secundarios incluyen pérdida de bigote, malestar estomacal, vómitos, diarrea y pérdida temporal del apetito. Cada sesión será de un par de horas, y el análisis regular de los riñones de los gatos y de las funciones del hígado son necesarios para comprobar que los niveles enzimáticos no están elevados.

Manejo nutricional. Los gatos en quimioterapia deben comer sólo una cantidad muy limitada de carbohidratos, porque las células cancerosas crecen en esa fuente de energía. Sin embargo, lo contrario sucede en la dieta de un gato que se somete a quimioterapia. Se aconseja la adición de ácidos grasos omega-3, como el aceite de pescado, y aminoácidos de  arginina.

Manejo del gato. Se puede producir orina o vómito durante al menos 24 horas después del tratamiento. Cualquier ropa que se haya manchado por el gato, dentro de este plazo, deben ser lavados dos veces con agua lo más caliente posible.

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