Los hábitos típicos de los gatitos recién nacidos se centran en seguir vivo y creciendo. Cuando los gatitos tienen la ventaja de una madre criándolos, el proceso es bastante simple. Te quedas atrás y dejas que la madre haga su trabajo. Tú apoyas a la mamá y ella apoya a los bebés.
Alimentación
Durante las primeras semanas de la vida de un gatito, este comerá cada hora o dos. La razón por la que el gatito se alimenta tanto es porque su pequeño cuerpo se duplicará en tamaño en tan sólo una semana. Después de comer, la mamá lo va a limpiar y a estimular para una evacuación intestinal y orinar. Si la mamá no está, se puede tomar un paño húmedo, suave y limpiar su área privada para lograr los mismos resultados.
Temperatura
Un gatito tiene muy poca capacidad de mantener su propia temperatura corporal. La mayor parte de su tiempo esta acurrucado con sus compañeros de camada y su madre trata de manterlo caliente. Durante los primeros días de su vida, su temperatura corporal se debe mantener alrededor de 97 grados. La temperatura se incrementa de forma gradual hasta la de un adulto que es de 100 grados. Si estás tomando el cuidado de un gatito recién nacido, mantén la temperatura ambiente alrededor de 97 grados y sin corrientes de aire hacia la cama del gatito, con una bolsa de agua caliente envuelta en una toalla.
Sentidos
Un gatito recién nacido puede retorcerse un poco, pero le tomará un par de días antes de que trate de caminar sobre sus piernas temblorosas. Durante estos días tiene poca o ninguna audiencia, no es capaz de ver. Él probablemente va a dormir durante la mayor parte de su tiempo y estará en vigilia sólo lo suficiente para comer. Su visión se desarrollará gradualmente para ver imágenes borrosas hasta alcanzar mayor claridad. Él se asusta fácilmente durante este tiempo en que aprende a usar sus nuevas habilidades.
Llanto
A nadie le gusta los bebés que lloran, aun si esos bebés son dos patas o cuatro piernas. Típicamente los gatitos recién nacidos no lloran mucho si se deja al cuidado de una madre a menos que haya un problema. El llanto constante, el crecimiento estancado y los ojos llenos de lágrimas son señales de que el gatito no está recibiendo suficiente leche de la madre o está enfermo.
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