Los ojos claros y despejados son un signo de buena salud, de forma contraria, las cataratas es una enfermedad de la lente del ojo que puede provocar problemas de visión o incluso ceguera en tu gato. Como buen dueño que eres, debes acudir al veterinario inmediatamente si sospechas que tu gato tiene problemas para ver ya que la atención a tiempo podría salvar su vista.
Causas. No hacen falta graves lesiones oculares o enfermedades para que un gato tenga cataratas y muchos desarrollan la condición como parte del proceso natural de envejecimiento. Por otro lado, un traumatismo en la zona de los ojos, en particular una lente perforada, puede causarlas. Por tal razón, si tienes varios gatos debes separarlos rápidamente cuando se pelean. Un golpe rápido o violento en la zona de los ojos podría provocar daños en los ojos y contribuir al desarrollo de esta enfermedad. La diabetes, la uveítis anterior, la disminución de los niveles de calcio en el torrente sanguíneo y la radioterapia, también están relacionadas con la formación de cataratas.
Síntomas. La opacidad es el síntoma más evidente de que un gato tiene cataratas y puede comenzar como una pequeña mancha y luego crecer. Puede tener un color azul claro o blanco lechoso o adquirir un color completamente opaco, en cuyo caso el gatico tendrá muy poca visión. Comprueba los ojos de tu gato sobre una base regular y si ves algo inusual, lo mejor será que acudas al veterinario. Si notas que tu mascota comienza a chocar con cosas que no debería como muebles o paredes, debes llevarlo al veterinario. Calcular mal las distancias cuando salta también puede ser una señal. Si tu gato salta y se cae, podría ser sólo por torpeza, pero si lo hace sobre una base regular, no debes ignorarlo.
Tratamiento. No te asustes si el veterinario comprueba los ojos de tu gato y le diagnostica cataratas. Si lo hace, pídele que le haga un examen para determinar si tiene otros problemas como diabetes o niveles bajos de calcio en la sangre. En ocasiones el tratamiento del problema subyacente, si es que existe, también ayuda a la salud de los ojos. Si tu gato es relativamente saludable, el veterinario puede sugerir un trasplante de lente. Esta cirugía puede restaurar la vista de tu mascota quitando la lente nublada para colocar una nueva lente artificial. Cualquiera que sea la opción de tratamiento que elijas, lo más probable es que tendrás que poner gotas en los ojos de tu gato por el resto de su vida.
Ceguera. Hay ocasiones en que la pérdida de visión es inevitable, pero eso no significa que tu mascota morirá o tendrá una vida terrible, aunque debes discutir a fondo todas las opciones con el veterinario. En el caso que la ceguera relacionada con las cataratas se produzca debido a la opacidad del ojo, debes centrar tu atención en hacer que la vida de tu gato sea lo más cómoda posible. Limita su acceso a un espacio más pequeño que conozca bien evitando siempre los nuevos entornos o espacios abiertos. Mantén su caja de arena y recipientes de comida en los mismos lugares para que sepa dónde puede encontrarlos. Por último, no lo dejes en lugares oscuros ya que los gatos ciegos pueden sentir y disfrutar del sol. Proporciónale a tu gato un buen lugar caliente junto a una ventana para que pueda dormir.
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